El cuerpo a pesar de ser una estructura fuerte tiende a sufrir ciertas alteraciones durante la realización de las actividades diarias ocasionando lesiones en el “tendón de Aquiles”, el cual se ubica en la parte posterior de la pierna, llegando hasta la parte posterior del pie.
Las mujeres presentan con mayor frecuencia esta lesión; la edad de desgaste es a partir de los 30 años ya que se empieza a degenerar este tendón, o por seguir la moda ya que usan tacones altos. Incluso, quienes practican deportes de vez de vez en cuando es muy común esta lesión.
Las lesiones en el tendón de Aquiles puede tener varias patologías, entre las que destacan: tendinitis (inflamación del tendón), bursitis (inflamación de la bursas), rupturas del tendón de Aquiles (desgarro del tendón de la parte de atrás de la pierna).
¿Síntomas?
- Hinchazón en el lugar de la inflamación.
- Limitación dolorosa de la flexión dorsal del pie (el pie no puede estirarse o llevarse hacia atrás).
- Dificultad para caminar.
- Dolor repentino.
- Dificultad para apoyarse sobre los dedos de los pies (de puntas)
- Sensación de rotura.